Tecnología para mejorar la calidad de vida de la vejez

La tecnología tiene un papel crucial y un futuro prometedor en la vida de las personas mayores. A medida que edad la avanza, se desarrollan soluciones cada vez más especializadas y adaptadas a sus necesidades.

Con lo cual, las razones por las que la tecnología seguirá siendo relevante en sus vidas es porque ha mejorado considerablemente la calidad de vida de nuestros mayores. De hecho, la tecnología está diseñada para abordar desafíos específicos asociados con el envejecimiento, ofreciendo soluciones innovadoras y mejorando diversos aspectos del bienestar, la salud, la movilidad, la comunicación, la seguridad de nuestros mayores.

Desde ViveLibre somos muy consciente de ello y en consecuencia, ofrecemos el apoyo tecnológico que te permite saber cómo están tus seres queridos en todo momento. En pocas palabras: somos la solución inteligente para ganar tranquilidad.

Los beneficios de la tecnología en la vejez

La tecnología tiene un impacto significativo y positivo en la vida de las personas mayores ya que proporciona herramientas y recursos que mejoran su bienestar, promueven la independencia y facilitan la participación en la sociedad moderna, logrando mejorar varios aspectos de sus vidas.

En primer lugar, internet proporciona acceso a una gran cantidad de información y recursos educativos. Los adultos mayores pueden aprender sobre una amplia variedad de temas, acceder a cursos en línea y mantenerse actualizados sobre noticias y eventos actuales. Lo que tiene como consecuencia una mayor conexión social, las redes sociales, aplicaciones de mensajería y la videoconferencia permiten que los adultos mayores se mantengan conectados con amigos, familiares y la comunidad, reduciendo la sensación de aislamiento y soledad, un aspecto clave en la calidad de vida de la vejez.

Respecto al cuidado de la salud, los avances que existen en la telemedicina son asombrosos, desde consultas médicas virtuales hasta monitoreo remoto de condiciones de salud y acceso a información sobre salud y bienestar. Además, destacar la importancia de los dispositivos wearables que incluso pueden rastrear signos vitales y promover un estilo de vida saludable. De hecho, algunos dispositivos están diseñados específicamente para medir la presión arterial de forma continua o puntual, como los tensiómetros inteligentes. También existen dispositivos de seguimiento de glucosa, para las personas mayores con diabetes, hay dispositivos wearables que pueden monitorear continuamente los niveles de glucosa en sangre sin necesidad de pinchazos constantes.

En cuanto a los aspectos de seguridad y asistencia, existen sistemas de alerta médica y dispositivos de asistencia en tiempo real, como sensores de caídas o dispositivos de localización GPS, logrando proporcionar una capa adicional de seguridad y asistencia en caso de emergencia.

La importancia de la Inteligencia Artificial

La adopción de nuevas tecnologías, como la Inteligencia Artificial (IA), ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años. Lo que alguna vez parecía un aspecto futurista ahora se está integrando rápidamente en nuestra vida cotidiana y en diferentes sectores de la sociedad.

La IA ha demostrado ser muy prometedora en el campo médico, especialmente en la mejora de la precisión diagnóstica. Un estudio publicado en la revista 'Nature Medicine' mostró que la IA era capaz de identificar enfermedades oculares con una precisión del 94%, en comparación con el 91% de los médicos expertos en oftalmología. Esto demuestra cómo los algoritmos de aprendizaje automático pueden analizar grandes cantidades de datos de imágenes médicas y reconocer patrones que a veces pueden ser difíciles de detectar incluso para profesionales experimentados.

En el caso de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, la capacidad de un algoritmo de IA para diagnosticar la enfermedad con una precisión del 96% es impresionante. La IA puede analizar múltiples factores, como imágenes médicas, datos genéticos y biomarcadores, lo que puede llevar a una detección temprana y precisa de la enfermedad, lo que a su vez permite una intervención más temprana y un tratamiento más efectivo.

Otro gran avance a destacar es la cirugía robótica asistida por inteligencia artificial, que ha demostrado ser una herramienta poderosa en el campo de la neurocirugía y en otros procedimientos quirúrgicos complejos. Los robots controlados por IA han mejorado la precisión, la eficiencia y la seguridad en diversas intervenciones, incluida la extirpación de tumores cerebrales. De hecho, un estudio publicado en la revista 'Journal of Neurosurgery' determinó que la cirugía robótica para la extirpación de tumores cerebrales fue más segura y efectiva que los métodos convencionales.


Las claves para llegar a los 100 años con buena salud

Está comprobado que envejecer de manera saludable es posible. En las últimas décadas, la esperanza de vida de las personas ha aumentado exponencialmente, siendo la media mundial superior a 70 años. Sin embargo, esta edad varía según el país, como es el caso de España, en el que existe una esperanza de vida que sobrepasa los 80 años en los hombres, y los 85 años en las mujeres.

De hecho, la longevidad y la salud han sido temas de interés continuo para la investigación científica. Si bien no hay una fórmula definitiva para vivir 100 años con salud, varios estudios han identificado ciertos factores y hábitos que pueden contribuir a una vida más larga y saludable.

 

Con soluciones como #ViveLibre, mejoramos la calidad de vida y aportamos tranquilidad a nuestros mayores.

Proceso de fomentar y mantener la capacidad funcional

La Organización Mundial de la Salud define envejecimiento saludable como el proceso de fomentar y mantener la capacidad funcional que permite el bienestar en la vejez. La capacidad funcional consiste en tener los atributos que permiten a todas las personas ser y hacer lo que para ellas es importante.

Cabe destacar que la Asamblea General de las Naciones Unidas lanzó en diciembre del 2020 la Década del Envejecimiento Saludable 2021-2030 como la principal estrategia para construir una sociedad para todas las edades. Esta iniciativa mundial aúna los esfuerzos de los gobiernos, la sociedad civil, los medios y el sector privado encaminados a mejorar la vida de las personas mayores, sus familias y sus comunidades.

Es importante tener en cuenta que la genética también desempeña un papel crucial en la longevidad, pero los hábitos de estilo de vida pueden influir significativamente en la calidad y la duración de la vida. Sin embargo, la investigación sobre la longevidad es un campo en constante evolución, y los avances continuos pueden revelar más detalles sobre cómo vivir más tiempo y de manera más saludable.

¿Cómo vivir más tiempo y de manera saludable?

Un reciente estudio publicado en National Library of Medicine que se llevó a cabo durante décadas con 660 personas ha determinado que tener una mentalidad positiva y complementar con una serie de autocuidados es fundamental para alcanzar un envejecimiento saludable.

De hecho, la investigación demostró que quienes tenían una mentalidad positiva sobre el envejecimiento vivían siete años y medio más que quienes tenían una mentalidad negativa. Incluso, la investigación ha descubierto que una actitud positiva hacia el envejecimiento se asocia con una presión arterial más bajauna vida en general más larga y saludable, así como un menor riesgo de padecer demencia.

Otro reciente estudio que acaba de ser publicado en la revista Nutrients en el que se revisaron los factores que afectan a la esperanza de vida y que además, exploraron las opciones de estilo de vida que pueden permitir a algunas personas vivir mucho más allá de un siglo.

Este último estudio, que ha estado a cargo de los investigadores Eduardo J. Simoes y Luis R. Ramos, se enfoca en el resultado de tres consejos para alargar la vida y aumentar las posibilidades de extenderla por encima de los 100 años.

"Los centenarios presentan, en general, una menor carga de morbilidad y tratamiento, y un menor uso de servicios sanitarios tanto primarios como hospitalarios que los octogenarios y nonagenarios, lo que sugiere un mejor estado de salud", han señalado los autores.

Claves para alcanzar una mayor y saludable longevidad

Como resultado, la ciencia ha revelado una serie de factores y hábitos que pueden tener un impacto significativo en la duración y calidad de nuestras vidas. Desde la nutrición y el ejercicio hasta aspectos emocionales y sociales. Explorar estos factores y hábitos ofrece una visión integral sobre cómo podemos mejorar nuestra salud y bienestar para lograr una vida más larga y satisfactoria.

    Dieta saludable: Una alimentación balanceada y rica en frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y grasas saludables puede tener un impacto positivo en la salud a largo plazo.

    Actividad física regular: El ejercicio regular no solo fortalece el cuerpo, sino que también puede mejorar la salud cardiovascular, la densidad ósea, la función cerebral y reducir el riesgo de enfermedades crónicas.

    Mentalidad positiva y manejo del estrés: La gestión adecuada del estrés y mantener una mentalidad optimista pueden tener un efecto significativo en la salud general y en la longevidad.

    Relaciones sociales fuertes: Mantener relaciones sociales sólidas y una red de apoyo puede tener beneficios para la salud mental y emocional, así como también impactar positivamente en la longevidad.

    Sueño adecuado: Dormir lo suficiente y tener un buen patrón de sueño puede ser crucial para la salud física y mental a largo plazo.

    Evitar hábitos perjudiciales: Reducir el consumo de alcohol, no fumar y evitar el uso de drogas ilegales puede contribuir a una vida más larga y saludable.

    Acceso a la atención médica: Recibir atención médica preventiva y buscar ayuda cuando sea necesario puede ayudar a abordar problemas de salud antes de que se conviertan en problemas graves.

En resumen, priorizar una dieta equilibrada, alejándose de los alimentos procesados, es fundamental para reducir riesgos de enfermedades cardiacas, cáncer y diabetes. Complementariamente, iniciar una rutina de ejercicio gradual y sostenible mejora la salud interna. Y, por último, cultivar relaciones sociales significativas es clave para retrasar el deterioro, ya que la ausencia de conexiones puede impactar negativamente en la salud mental y física.


Interactuar y jugar con niños mejora la salud mental de las personas mayores

Un estudio señala que la conexión entre generaciones puede tener un impacto positivo en la salud mental de las personas mayores. La investigación que se llevó a cabo en Sudáfrica y que fue publicado en PLOS ONE sugiere que los programas que promueven la interacción entre adultos mayores y niños y niñas pueden brindar beneficios para la salud mental, lo cual es muy interesante y respalda la importancia de la interacción intergeneracional en el bienestar emocional.

La ansiedad y la depresión son afecciones de salud mental comunes, especialmente en la tercera edad, y pueden estar relacionadas con la soledad y el aislamiento social. La interacción con niños y niñas proporciona una vía efectiva para combatir estos sentimientos al brindar compañía, alegría y una sensación de propósito a las personas mayores.

De hecho, este estudio destaca la necesidad de promover y respaldar programas que fomenten la interacción intergeneracional, ya que pueden ser una intervención efectiva en la atención de la salud mental en las poblaciones de la tercera edad. Alentando la participación activa en tales programas, es posible ayudar a las personas mayores a mantener su bienestar emocional y, al mismo tiempo, enriquecer la vida de los niños y niñas que participan en estas interacciones.

El estudio

Para profundizar la comprensión de los beneficios potenciales de las interacciones intergeneracionales, las autoras de la investigación Elizabeth Jane Earl y Debbie Marais de la Universidad de Stellenbosch (Sudáfrica), realizaron un estudio en una residencia de ancianos. Allí los residentes podían interactuar regularmente con niños en edad preescolar. Las actividades incluían juegos, armar rompecabezas, leer o cantar con los niños. El programa está en línea con una filosofía de cuidado de ancianos llamada "Alternativa Edén", que tiene como objetivo minimizar los factores que contribuyen a la ansiedad y la depresión.

Earl y Marais se basaron en evidencias que sugiere que los programas que permiten a los adultos mayores interactuar regularmente con los niños pueden mejorar la salud mental.

Las autoras invitaron a rellenar un cuestionario en el que se evaluaban sus niveles de ansiedad y depresión y se les pedía que describieran sus experiencias con los pequeños. En el estudio participaron diez mujeres, cuatro de las cuales con ansiedad, depresión o ambas. Todas ellas interactuaron con los niños, aunque algunas más que otras. En general, todas relataron experiencias positivas.

"Las interacciones con los niños promueven un sentido de pertenencia y propósito, evocan recuerdos e influyen positivamente en el bienestar mental de las personas mayores", afirman las autoras.

Como resultado, la investigación subraya la importancia de las relaciones intergeneracionales en la promoción de la salud mental en la tercera edad y proporciona un argumento convincente a favor de la implementación de programas que fomenten estas interacciones para mejorar el bienestar emocional de las personas mayores.

La interacción intergeneracional: factores positivos

La idea de que jugar con niños puede mejorar la salud mental de las personas mayores se basa en varios factores positivos que surgen de esta interacción intergeneracional. A continuación destacamos algunos puntos clave que explican por qué esto es tan beneficioso:

Estimulación cognitiva: Jugar con niños a menudo implica actividades que desafían la mente, como resolver rompecabezas, contar, aprender nuevas reglas de juegos y mantenerse al tanto de la imaginación de los niños. Esta estimulación cognitiva puede ayudar a mantener la mente activa y ágil en las personas mayores, lo que es fundamental para prevenir el deterioro cognitivo.

Reducción del estrés: La interacción con niños puede ser relajante y divertida. Jugar, reír y compartir momentos con los más jóvenes puede reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo, lo que a su vez puede tener un impacto positivo en la salud mental de los adultos mayores.

Sentimiento de utilidad: Pasar tiempo con niños puede dar a las personas mayores un sentimiento de propósito y utilidad. Pueden sentirse valorados y apreciados por su papel en la vida de los niños, lo que a su vez aumenta su autoestima y bienestar emocional.

Conexión social: La interacción con niños también fomenta la conexión social. Puede llevar a una mayor participación en la comunidad, la interacción con otros padres y abuelos, y la creación de relaciones significativas con los propios nietos. La conexión social es fundamental para mantener la salud mental en la vejez.

Aprendizaje mutuo: La interacción intergeneracional proporciona oportunidades para el aprendizaje mutuo. Los adultos mayores pueden compartir su sabiduría y experiencia, mientras que los niños pueden aportar su entusiasmo, curiosidad y nuevas perspectivas. Esto enriquece las vidas de ambas generaciones.

Ejercicio físico: Muchas actividades de juego con niños implican movimiento físico, lo que puede ser beneficioso para la salud física de los adultos mayores. El ejercicio regular también está relacionado con la salud mental, ya que libera endorfinas que mejoran el estado de ánimo.

En resumen, interactuar y jugar con niños puede ser una experiencia enriquecedora que tiene múltiples beneficios para la salud mental de las personas mayores. Fomenta la estimulación cognitiva, la reducción del estrés, la conexión social, el sentimiento de utilidad y el ejercicio físico, lo que contribuye a una mejor calidad de vida en la vejez. Esta interacción fortalece las relaciones familiares y comunitarias, promoviendo una sensación de bienestar y felicidad en todas las edades involucradas.


El secreto de la felicidad después de los 65 años es cultivar una afición

Cultivar una afición después de los 65 años genera mayor satisfacción vital, alejando el riesgo de depresión. Así lo determina un reciente estudio realizado en 16 países y tres continentes.

El estudio que fue publicado en la revista Nature Medicine asegura que cultivar una afición mejora la salud de los mayores. Sin embargo, para que una persona mayor se anime a cultivar una afición, hay muchas condicionantes que entran en juego, y que es importante tener identificadas con el fin de promover su desarrollo.

En este sentido, es importante destacar la importancia de dar autonomía y animar a las personas mayores a realizar estas actividades. Y, la tranquilidad que los servicios ViveLibre ofrecen, es clave para conseguirlo.

El secreto de la felicidad 

Las aficiones o hobbies son de vital importancia en la vejez. Consisten en actividades adicionales a la rutina que son altamente significativas y satisfactorias.

Tomar una clase de baile, unirse a un club de lectura, trabajar en el jardín de casa, hacer voluntariado y mucho más. Tener un hobby es el secreto que lleva a las personas mayores a vivir con mayor felicidad y, sobre todo, con menos síntomas depresivos.

De hecho, cualquier afición o hobby permite diversificar el desempeño cotidiano, brindando mayores demandas físicas, cognitivas, sociales, emocionales e incluso sensoriales a nuestro organismo.

“Nuestro estudio muestra el potencial de las actividades recreativas favoritas para proteger a las personas mayores del deterioro mental y promover el bienestar”, señaló en un comunicado Karen Mak, investigadora principal de epidemiología y estadística del University College de Londres y autora principal del estudio. “Los pasatiempos pueden contribuir a una vida satisfactoria en la tercera edad a través de muchos mecanismos, como el control de la mente y el cuerpo, la búsqueda de un propósito en la vida y la sensación de competencia para afrontar determinados problemas cotidianos”, explica Mak.

Menos síntomas depresivos y más felicidad

En la investigación participaron más de 90.000 individuos de Europa, Japón, China y Estados Unidos. En realidad, se trata de una encuesta en la que se destaca cómo tener un hobby estaba relacionado con menos síntomas depresivos y más felicidad en los encuestados, todos ellos mayores de 65 años.

Cabe destacar que el porcentaje de personas que practican una actividad recreativa específica varía de un país a otro. En España, por ejemplo, el 51% de los participantes en el estudio afirmó tener un hobby, frente al 96% de Dinamarca y el 95.8% de Suecia (curiosamente, Dinamarca ocupa el puesto número 2 en la lista de los países más felices del mundo en 2023, mientras que Suecia toma la séptima posición). Por el contrario, la participación más baja se registró en China, donde únicamente el 37.6% de los participantes en el estudio dijeron tener una, aunque los investigadores explicaron que solo se preguntó a los encuestados por aficiones sociales.

El estudio reveló que tener un hobby tiene sus ventajas en todos los países encuestados. Incluso, los datos recopilados revelan que las personas que practicaban una actividad favorita eran principalmente las de los países con mejor esperanza de vida.

Cultivar una afición: recreación y bienestar

“El trabajo realizado sugiere que la relación entre las aficiones recreativas y el bienestar puede ser bidireccional: las personas con mejor salud mental pueden ser más propensas a dedicarse a una afición y, al mismo tiempo, cultivar una puede ayudar a mantener una mejor satisfacción vital”, añadió Mak a las conclusiones del estudio.

Las aficiones son en sí mismo un beneficio, porque permiten a las personas mayores, llenar tiempo libre y de ocio. Ocurre que cuando una persona alcanza su jubilación, su mayor desafío está en la reestructuración de la rutina. Entre las barreras que limitan los comportamientos de ocio de las personas, existen factores como la vinculación y participación que tengan los adultos en sus ambientes significativos.

“De hecho, si la persona mayor pasa el día escuchando radio y viendo TV, es decir, dos actividades sedentarias, solitarias y sin demanda motora, ni social, entonces la musculatura y la cognición comienzan a deteriorarse, y afectará la capacidad funcional de esa persona”, explica la académica de la Escuela de Terapia Ocupacional de la Universidad de los Andes en Chile, Antonia Echeverría.

Entonces, con el envejecimiento de la población en Europa y en todo el mundo, crece el interés por saber cómo las actividades recreativas pueden ayudar a mejorar la salud mental de las personas mayores de 65 años.

 


¿Perro o gato? Los beneficios de tener mascota y cuál es mejor para acompañar a personas mayores

Vivir con un animal de compañía contribuye a mejorar la calidad de vida y ayuda al bienestar mental y social. Los beneficios en la salud que se producen gracias a ese vínculo, de hecho, son aceptados y conocidos desde siempre.

Desde ViveLibre apostamos por contribuir a la autonomía de las personas. Y en este sentido, tener mascota aumenta el estado de salud físico y mental, la longevidad, facilita la recreación, reduce el estrés y disminuye el índice de depresión en general.

En cada etapa de la vida, las mascotas juegan un papel fundamental y  se ha demostrado que la interacción con animales aumenta los niveles de serotonina y dopamina, componentes químicos de los sentimientos positivos.

 

Los beneficios para personas mayores de tener mascota

Según explican desde la Fundación Affinity, tener mascota potencia las relaciones sociales con otras personas, actuando como un "facilitador de las relaciones sociales". Este factor puede ser muy importante para los ancianos que viven aislados ya que alivia la sensación de soledad.

 

Además, la mayoría de las personas que viven solas hace que se sientan necesarias al tener que cuidar de otro ser vivo. Esto les ayuda a mantenerse activos y comprometidos. Al tener sus rutinas de cuidado diarias: aseo, juego, comida, y demás, las personas mayores estimulan la memoria y la atención al convivir con un animal de compañía.

Estudios recientes confirman que la convivencia con un animal hace que, hasta en el 75% de los casos, las personas mayores reduzcan sus niveles de estrés, mejoren sus problemas de salud y adquieran fortaleza física, al reducir los niveles de sedentarismo habitual en edades avanzadas.

No es casualidad que durante los últimos años, se hayan desarrollado con mayor asiduidad las terapias asistidas con perros entre ancianos, que suelen realizarse tanto en residencias como, incluso, en aquellos domicilios de personas que viven solas y reciben una atención domiciliaria.

 

La mascota ideal: la que se adapte a tu situación

Como bien sabemos, los gatos son más independientes y requieren menos cuidados y obligaciones. Por este motivo, su compañía es recomendable para personas de edad avanzada que tengas problemas de movilidad o discapacidad. En definitiva, un perro lleva mucho más cuidado que un gato.

Los perros requieren de más de un paseo diario. Por ello, ayudan a incentivar el envejecimiento activo en las personas de edad avanzada. También ayudan a sociabilizar con otras personas durante esos ratos, donde con ViveLibre tendrán siempre a mano el botón verde por si ocurriese cualquier imprevisto.

La clave es elegir el que mejor se adapte a tu situación. Por último, tener en cuenta la edad de la mascota también ayudará. De hecho, adoptar una mascota que tenga cierta edad es siempre una opción muy recomendable. Así, evitaremos el periodo de cachorro donde son más nerviosos y además, estará educado.